Antes de nada, vamos a hablar de la importancia de un desayuno equilibrado, ya seamos adultos o niños. El desayuno es de las comidas más importantes del día, ya que va a aportar la energía necesaria para el comienzo del día.
Las rutinas diarias empiezan desde bien temprano tanto para los pequeños como los mayores de la casa, y por ello es importante que hagamos un aporte nutricional a nuestro cuerpo para que pueda quemar libremente y utilizar todos esos nutrientes según los vaya necesitando.
En función de la actividad de cada persona y sus características, necesitaremos una dieta u otra, pero siempre dejando claro que es importante no saltarse el desayuno. Esta primera comida del día se considera 1/4 de la energía que nuestro cuerpo recibe para el día a día, de ahí su importancia en todas las dietas alimentarias sea cual sean tus necesidades.
Los desayunos pueden ser en forma de galletas, snacks, frutas, lácteos, etc… Basándonos siempre en alimentos que aporten vitaminas, minerales, fibra, hidratos de carbono y muy importante, agua.
Ahora que vamos a disfrutar todos del verano, la subida de temperaturas provoca un aumento en la quema de líquidos en nuestro cuerpo, esfuerzo+altas temperaturas, significa que debemos aumentar nuestro consumo de agua.
Claves de un Desayuno Equilibrado
Lo importante es hacer una comida saludable y nutritiva, que impacte de forma positiva en nuestro organismo, para ello debemos buscar alimentos que sean ricos y además entre ellos sean un cocktail de energía para salir de casa con fuerza.
Hay que tener en cuenta también que el desayuno rompe con el ayuno nocturno, por lo tanto tiene que ser un aporte sin muchos excesos y a ser posible de forma tranquila y pausada. Y si hace falta nos despertamos con antelación para poder desayunar sentados, 10 minutos bastarán para degustar un desayuno equilibrado.
El desayuno es nuestro aliado contra la ansiedad, el cansancio, el estrés, hambre, y muchas veces nos ayuda contra una mala alimentación. Si no desayunamos probablemente comeremos cualquier alimento pesado a mitad de mañana.
El desayuno debe de contener el 30% del aporte energético diario.
Elige alimentos ricos en nutrientes para activar nuestro organismo, puedes optar por frutas como el kiwi, la sandía, el melón, las fresas, tostadas con miel, aceites, queso, jamón, tomate, como también zumo y yoghurt con frutos secos por ejemplo.