En lo tiempos que corren, todos estamos preparando o hemos preparado ya nuestro gimnasio para entrenar en casa. El coronavirus ha cambiado nuestras rutinas y hábitos, o por lo menos nos ha obligado a cambiarlos de ubicación.
Más bien nos ha obligado a centralizarlos todos o casi todos en un mismo lugar, nuestra casa.
El confinamiento, toque de queda, medidas de seguridad e higiene, incluso el miedo a ser contagiado, ha hecho que todos montemos un mini gym casero en nuestros hogares.
Esterillas, pesas, cintas, aparatos de dominadas, bancos de abdominales, entrenamientos en streaming de Zumba, Pilates, Gap, Core, espalda sana, Body Pump, etc…¡Todo en el salón de nuestra casa!
Entrenar en Casa
¿Cómo empezar a entrenar en casa? Nuestro consejo principal es que trabajes poco a poco, no le exijas demasiado a tu cuerpo, ya que las lesiones por abuso de ejercicio son muy habituales. Además, los primeros días de entrenamiento tendrás que lidiar con las famosas agujetas, por lo tanto si haces un sobreesfuerzo, te costará más ser constante.
Ahora no es el momento de plantearse metas, maratones o un súper cuerpo, es el momento de conseguir una rutina saludable de ejercicio que mejore nuestra calidad de vida.
Un error habitual es pretender sacar toda la energía en el entrenamiento, haciendo esfuerzos por encima de nuestras posibilidad, tu puesta a punto es una carrera de fondo.
No pretendas entrenar todo el cuerpo el mismo día, un entrenamiento para hace espalda, brazo, piernas, culo… ¡No! Entrena cada día una parte de tu cuerpo, poco a poco ve fortaleciendo y tonificando tu extremidades, para qué cuando tu resistencia aumente, puedas subir de nivel.
Es recomendable que planteemos dos sesiones al día, si tenemos la posibilidad de hacerlo. Activa tu cuerpo por la mañana con estiramientos, aunque sea caminar un poco, incluso dentro de casa.
Es importante la continuidad, no tenemos que concentrar todo en nuestra sesión de ejercicio al día. Como probablemente estemos teletrabajando, tenemos que levantarnos de vez en cuando, estirar nuestro cuerpo cuando atendemos una llamada por ejemplo, salir a caminar mientras hablamos con un cliente. Procura combinar trabajo con actividad física.
¿Nervios o ansiedad? El ejercicio sirve como vía de escape a nuestra sensación de encerramiento, a la tensión laboral y la presión por la situación derivada de la COVID-19. La solución no es ver el telediario todo el día para ver la evolución de la pandemia, tenemos que utilizar el ejercicio para evadirnos de todo lo que nos agobia.